miércoles, 16 de junio de 2010

La mariposa Penacho Blanco, de lo más extraña y hermosa

El penacho de cinco plumas (Pterophorus pentadactylus) es una de las mariposas más extrañas y curiosas que existen. Se trata de una especie de polilla con alas de color blanco puro divididas en cinco bandas plumosas a cada lado —dos en el ala anterior y tres en la posterior—, de manera que parece tener dedos plumosos en vez de alas. No es rara verla revoloteando en los atardeceres de junio y julio en la mayor parte de Europa. La oruga mide unos 20 mm de longitud; es de color verde y peluda. Se alimenta de correhuela, e hiberna cuando es pequeña para completar su desarrollo en primavera



La Pterophorus pentadactyla o Penacho Blanco. Una polilla que habita en la mayor parte de Europa, muy común en Gran Bretaña.
Es la más bella y la más grande de las polillas “penacho”, y sin duda la única que es totalmente blanca. Pude ser vista entre junio y agosto. Sus alas miden entre 25 y 30 milímetros. Los dejo con algunas fotos para que se deleiten.






El pez espinoso elije a sus líderes “democráticamente”

EFE
Al parecer los clásicos griegos aprendieron los rudimentos de la democracia observando a los peces, o al menos eso se podría inferir a la luz de un nuevo descubrimiento que demuestra que eligen a sus líderes por consenso.

Según un estudio publicado en la revista Current Biology, el pez espinoso, nombre científico Gasterosteus aculeatus, eligen a sus líderes por “votación” y cuanto más grandes y rechonchos, más posibilidades tienen.

El consenso se consigue siguiendo una "sencilla norma": unos cuantos peces eligen primero a los individuos que consideran que serán los mejores líderes y el resto secunda luego al grupo de seguidores más numeroso, dice David Sumpter, investigador de la Universidad de Uppsala, Suecia, y coautor del estudio.
Los primeros, para elegir, se fijan muy bien en algunas características del aspirante a líder, entre ellas, el peso, el tamaño, la tonalidad o la presencia de manchas en la piel.
Estas características, dicen los autores, reflejan cosas sobre las aptitudes y el estado de salud de los candidatos. Por ejemplo, una barriga oronda podría indicar que el aspirante no tiene problemas para conseguir comida, mientras que una piel moteada podría ser un signo de infección.

El experimento, dirigido por Ashley Ward, de la Universidad de Sydney (Australia), consistió en ver qué hacían uno, dos, cuatro u ocho peces cuando tenían que elegir entre dos peces iguales pero con alguna característica que hiciera a uno de ellos más atractivo (según esos criterios de "belleza" para peces).
Así, los investigadores han descubierto que cuantos más peces deciden, más probabilidad hay de que la elección sea la acertada. En la mayoría de los ensayos que realizaron todos o casi todos los individuos seguían al líder más atractivo, aunque también se dieron casos en que todos o casi todos se equivocaron, señalan los autores.
Pensarán algunos que el pez espinoso tiene un criterio muy pobre, pero lo cierto es que este fenómeno también se da entre los humanos. Un buen ejemplo es lo que ocurre en el mercado de valores, apunta Sumpter, en la que muchos corredores son incapaces de hacer su propia evaluación y, presos del pánico, venden porque el resto lo hace.
"En estos casos, este comportamiento parece de algún modo irracional. Pero en muchos escenarios, tal conducta es perfectamente racional. Ver qué hacen los demás y copiarse si hay mucha gente que parece hacer lo mismo es, en general, una buena estrategia", dice el investigador.

La idea de que en ocasiones nos podemos dejar llevar por la multitud, aún a costa de equivocarnos, no es nueva. Un "ejemplo clásico" que ilustra hasta qué punto la presión social nos afecta es el experimento de conformidad de Asch, publicado en los años 50, menciona Sumpter a Efe.
El experimento, diseñado por el psicólogo norteamericano Solomon Asch, consistió en comprobar cómo influían las opiniones de los miembros de un grupo sobre un individuo, en relación a cosas tan sencillas como decir, por ejemplo, si dos líneas tenían o no la misma longitud.



Hasta el 75% de los participantes se unieron al consenso (premeditadamente equivocado) dando voluntariamente una respuesta errónea en al menos una de las preguntas.

Tarcero pigméo, el primate diminuto de Indonesia que se creía extinto

No es un gremlin el de la foto, es un tarsero o tarsier pigmeo, un primate que se creía extinto de los bosques de Indonesia. No se había visto un ejemplar desde 1920.


Es diminuto, apenas si pesa unos 57 gramos. Fue descubierto por una expedición de la Universidad de Texas.
“Todo el mundo hablaba de los tarseros pigméos”, dice Sharon Gursky-Doyen, miembro de la expedición. “Han habido docenas de expediciones buscándolos, todas infructuosas. Yo necesitaba ir y probar por mi cuenta si realmente estaban allí o si habían desaparecido para siempre”.
En una época eran muy abundantes los tarseros pigméos en las montañas boscosas y musgosas del parque nacional Lore Lindu en Sulawesi (Célebes). Pero casi desaparecieron cuando su hábitat fue destruido en los años 70, con el exceso de tala de bosques.
Son criaturas nocturnas, y viven en ambientes muy oscuros para evitar a los depredadores. Pero en bosques abiertos por la tala, quedaban expuestos a sus depredadores, y fueron desapareciendo.


Los expertos ahora esperan que el descubrimiento haga que el gobierno de Indonesia se ponga más fuerte en lo que concierne a la protección de los tarseros pigméos.

martes, 15 de junio de 2010

Elysia chlorotica, la babosa que también es planta

Se trata de la babosa marina Elysia chlorotica, cuya característica más interesante es que es un animal pero así y todo realiza la fotosíntesis como los vegetales.
Por ahí a alguno se le escapa lo extraordinario de este detalle. Los animales comemos a otros seres vivos para poder alimentarnos, gracias a ellos conseguimos nuestra energía. Los seres vivos que comemos pueden ser animales o vegetales, si son animales seguramente ellos hayan comido alguna planta, o sino pueden haber comido a otros animales que sí han ingerido vegetales.

No, no es un trabalenguas. La idea es que los únicos que producen su propio alimento, en vez de apropiarse del trabajo ajeno, son los vegetales. Ningún animal lo hace. Excepto esta babosa marina cuyo nombre científico es Elysia chlorotica.
¿Cómo lo hace? No, no es ninguna santa, como buena representante del mundo animal, se lo roba a un vegetal, por supuesto. La chlorótica come algas, pero a diferencia de cualquier otro animal que las come, dentro de esta babosa se descomponen de una forma que las estructuras fotosintéticas quedan preservadas.
Estas estructuras llamadas plástidos se mueven luego a la “piel” del caracol, y una vez allí siguen realizando la fotosíntesis. Así es que la chlorótica puede producir sus alimentos al estilo vegetal. Esos plástidos pueden continuar durante meses funcionando.
Hace poco un grupo de científicos estudió su genoma, y descubrieron que son más similares a las plantas de lo que antes se creía.


El asunto es que los plástidos no pueden funcionar por sus propios medios, necesitan algunas proteínas como ayuda para hacerlo. Esas proteínas están en las algas. Lo que descubrieron los científicos de la Universidad de Maine es que la chlorótica tiene en su ADN el gen necesario para la fotosíntesis.
Fuente: Carl Zimmer


Los canguros serían originarios de China, según estudio genético

El dicho “los chinos inventaron todo” es cierto hasta para los animales. Y es que al parecer los canguros serían originarios de China. Científicos australianos han logrado el primer mapa detallado del genoma de los canguros, y descubrieron que su origen fue en China y que llegaron a Australia a través de América y la Antártida.
"Lo que hemos hecho es un mapa muy detallado del genoma, que es como el mapa de una calle que tiene 20.000 casas", dijo Jenny Graves, directora del Centro de Excelencia para la Genética de los Canguros (KanGO, según sus siglas en inglés).
Los canguros poseen unos 20.000 genes, muchos de los cuales son iguales a los de los seres humanos, por lo que "su decodificación permitirá conocer lo que eran los seres humanos hace 150 millones de años", según Graves.

Graves asegura que seres humanos y canguros separaron su evolución hace 150 millones de años, mientras que el ratón y el hombre compartieron un ancestro hace sólo 70 millones de años




"Hay algunas diferencias. Nosotros tenemos un poco más de esto, un poco menos de aquello. Pero son los mismos genes y prácticamente en el mismo orden", afirmó la directora del KanGo.
Existen 26 especies de canguros en Australia y 200 de marsupiales, pero la investigación sólo estudió al wallaby de Tammar (Macropus eugenii).
EFE.

El camaleón más pequeño del mundo, el Brookesia minima

Habíamos visto ya la serpiente más pequeña del mundo, y siguiendo con los animales más pequeños del mundo, ahora les voy a presentar a un camaleón que se caracteriza por ser extremadamente diminuto. Es el camaleón más pequeño del mundo pertenece al género Brookesia.

Imagen por Kirill: Neverwinter Alps

Los camaleones son raros, ya lo sabemos, aquí vimos a uno que se pasa gran parte de su vida dentro de un huevo, y también los vimos como maestros del camuflaje. Pero el Brookesia se caracteriza por no pasar de los 10 centímetros de largo. Este género de camaleones aglutina a 25 especies, dentro de las cuales se encuentra el camaleón enano, Brookesia minima.
Imaginen que ese nombre científico le fue dado porque es diminuto, apenas si mide entre 1,5 y 2,5 centímetros de largo. Sí, el tamaño de medio dedo pulgar. Los machos son los más pequeños, ya que las hembras pueden llegar a ser un poco más grandes.
Imagen por Judith Bakker

Son originarios de una pequeña isla ubicada al noreste de Madagascar, Nosy Be.Se los puede ver allí y en la reserva Monongarivo, en la isla de Madagascar. Suelen vivir en las hojas bajas del bosque tropical de la pequeña isla, y son bastante solitarios, ya que suelen ser agresivos entre sí. Se cree que suelen tener un territorio de un metro cuadrado, dentro del cual no entran los demás camaleones enanos sin ser atacados por el dueño del terreno.



La serpiente más pequeña del mundo

La serpiente más pequeña del mundo -de aproximadamente diez centímetros de largo y tan ancha como un espagueti- fue descubierta en la isla caribeña de Barbados.
Expertos consideran que el reptil, hallado bajo una roca en un pequeño bosque amenazado, alcanza el límite justo sobre qué tan pequeña puede ser una serpiente.Las hembras ponen un solo huevo de grandes proporciones y los críos nacen a la mitad del tamaño que tendrán de adultos.

El hallazgo apareció en la publicación científica Zootaxa.La serpiente - conocida como Leptotyphlops carlae- es la más pequeña de los 3.100 tipos de especies de serpientes y fue descubierta por el doctor Blair Hedges, un biólogo de la Penn State University de Estados Unidos.
"Me emocioné cuando voltié la roca y la encontré", le dijo Hedges a la BBC."Luego de encontrar a la primera, buscamos entre cientos de piedras y hallamos otra", añadió.
En total, Hedges y su esposa quien es herpetóloga, encontraron sólo a dos serpientes hembras.
Identificación de especies
En opinión de Hedges, la serpiente se alimenta de termitas. Según él, otros tres antiguos especímenes de esta especie se encontraban en colecciones -uno en el Museo de Historia Natural en Londres y dos en un museo en Martinica.Sin embargo, estos no habían sido identificados correctamente.
Hedges explicó que es difícil identificar a una nueva especie cuando el organismo es tan pequeño."Las diferencias en los animales pequeños son mucho más sutiles y por eso frecuentemente se pasan por alto", expresó.La toma moderna de huellas genéticas es a menudo, la única forma de identificar una nueva especie."El ADN es tan diferente entre dos pequeñas serpientes como entre dos grandes, lo que nos permite observar las diferencias que no vemos a simple vista", indicó.
Según los investigadores, la serpiente es tan poco frecuente que por ello no había sido descubierta sino hasta ahora.Sin embargo, con 95% de la isla de Barbados ahora sin árboles, y con fragmentos de bosque seriamente amenazados, esta nueva especie de serpiente podría estar en peligro de extinción sólo meses después de su descubrimiento.
BBC Mundo